La Sra. Rivera llegó a la Escuela en el año 1991 para hacerse cargo como maestra titular de los alumnos de 7° Grado. Poseía ya una sólida formación académimica y cultural que fue optimizando a lo largo de su carrera docente. En ella prevaleció, día a día, el lenguaje del entusiasmo. Profesora de informática, se adelantó a su tiempo utilizando esta herramienta para la enseñanza y, con la generosidad que siempre la caracterizó, acompañó a sus pares para la adquisición de este recurso.Siempre inquieta en la búsqueda de nuevas opciones para su desempeño docente, realizó aportes concretos para la biblioteca de la escuela contactándose y solicitando material a editoriales de primera línea. cabe mencionar, entre sus logros al respecto la comunicación que estableció vía Internet con una ex-alumna que reside en Australia.
Ésta, conmovida por el discurso de la docente en relación a las necesidades de la institución, envió en varias oportunidades un sinnúmero de textos, sugeridos por su maestra, de alto valor literario y económico. Fue una manera de agradecer a su querida escuela por la formación recibida.
La confianza que generaba esta docente en la Dirección determinó su paso por los distintos niveles de la escolaridad primaria; su idoneidad fue altamente valorada.
Teresita se perfeccionó en literatura infantil; constituía un verdadero placer asistir a sus clases de narración oral tanto por el efecto que producía en sus oyentes, como por la diversidad de estrategias que desplegaba, aquilatando aún más el recurso utilizado.
Los chicos esperaban ansiosos estos momentos mágicos en los que vivían aventuras y concretaban fantasías, desarrollando su mundo emocional y sus posibilidades expresivas.
Sus últimos alumnos fueron chiquitos de primer grado. En cada actividad se podía observar a Tere dedicada y comprometida. Desde el desayuno acompañaba a sus nenes personalizando la atención; y así detectaba sus necesidades y contenía con decisiones apropiadas. ¡Cuántas veces veces supo escuchar las problemáticas familiares que tanto influían en los nenes y a cuántos papás alentó con la palabra justa!.
Nunca olvidaré su reacción cuando alguien criticaba a uno de sus chicos. Producía ternura y sonrisas verla abrazarlos como diciendo:- "¡Primero deberán vérselas conmigo!"
Es que a ella le dolía el dolor de estos niños y procuraba las mejores alternativas para mejorar sus difíciles condiciones de vida y ¡ lograba el aprendizaje!.
Creía profundamente en la educación como instrumento de superación y buscaba hacer posible el milagro del crecimiento. Tenía capacidad para dar y su instinto maternal a flor de piel.
Teresita Rivera supo disfrutar de su trabajo haciéndolo en alegre anonimato. Fue amiga incondicional. Peleó sus batallas con esperanza y se enfrentó a sus miedos cara a cara y así en lugar de victimizarse se volvió protagonista de cada una de sus luchas; hasta aquella final que tronchó su vida un 18 de abril de 2005, a los 53 años.
A pesar de ello Tere sigue aquí porque fue un ser digno.
Tere y su historia...
No es sólo un conmemorar, es aprender de su hacer aún de lo que no pudo seguir viviendo.
"Cuando te separes de un amigo no sufras, porque lo que más amas en él,
se volverá nítido en su ausencia, así como la montaña
es más clara desde el llano, para quien viva en ella"
Khailil Gibran
¡Hasta cada momento Tere!
Teresa Del Priore
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Violeta -
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